la arqueología
lunes, 22 de octubre de 2018
Arqueología Subacuática
La arqueología es la ciencia que se encarga del estudio de las estructuras históricas, económicas y sociales del pasado a través de la recopilación y la investigación de los elementos de cultura material, fruto de la actividad pretérita de una sociedad. La actividad arqueológica bajo el agua ha recibido diversos nombres a lo largo del tiempo: hidro-arqueología, acqueologia, arqueología marina, arqueología submarina y arqueología subacuática.
Arqueología aérea
La arqueología aérea es la rama de la arqueología que los estudios e interpreta las imágenes aéreas (obtenidos por avión, globo o otros aparatos voladores) con el fin de descubrir o definir posibles sitios arqueológicos , por lo general no son visibles a nivel del suelo. Tres tipos de modificaciones, debido a la presencia de restos enterrados, son detectables en las fotografías obtenidas en condiciones ideales de iluminación y de estacionalidad: los niveles de modificación, color del suelo o el desarrollo de los cultivos. Estos cambios pueden detectar viejas estructuras antrópicas.
Las ventajas de disponer de una buena vista aérea del terreno son apreciadas por los arqueólogos pues un punto de vista elevado permite una mejor apreciación de los detalles y de sus relaciones en un contexto más amplio. Los primeros investigadores trataron de obtener vistas de sitios arqueológicos utilizando aire caliente globos, puntales o cámaras conectadas a cometas (cometas). Después de la invención del avión militar y la importancia de la fotografía aérea adquirida durante la primera y segunda guerra mundial, los arqueólogos comenzaron a utilizar efectivamente la tecnología para descubrir y registrar los sitios arqueológicos.
Las fotografías se pueden tomar o verticalmente, es decir, desde un punto que está directamente sobre el lugar fotografiado, o oblicuamente, lo que significa que se toma desde otro ángulo. Con el fin de proporcionar un efecto tridimensional, un par de imágenes verticales que se superponen parcialmente para compensar cualquier posición y se puede ver de forma estereoscópica .
Arqueología Bíblica
La arqueología bíblica es la parte de la arqueología que se especializa en el estudio de los restos materiales que tienen relación directa o indirecta con los relatos bíblicos, sean estos del Antiguo (Tanaj) o del Nuevo Testamento, y con la historia y cosmogonía de las religiones judeocristianas. El lugar principal de esta parte de las ciencias arqueológicas es lo que en dichas religiones es denominado Tierra Santa, y desde la perspectiva occidental Medio Oriente. Si bien los elementos principales de la arqueología bíblica son referentes teológicos y religiosos en su mayoría, esta es una ciencia en toda su dimensión metodológica. Como sucede con otros registros históricos de otras civilizaciones, los manuscritos deben ser comparados con otras sociedades contemporáneas de Europa, Mesopotamia y África. Las técnicas científicas empleadas son las mismas de la arqueología en general como las excavaciones y la datación por radiocarbono, entre otras. En contraste, la arqueología del antiguo Medio Oriente trata simplemente del Antiguo Oriente Próximo, o Medio Oriente, sin particulares consideraciones acerca de si sus descubrimientos se relacionan con la Biblia.
La arqueología bíblica es una materia de estudio polémica, con varios puntos de vista sobre cuál es el propósito y las metas que esta tiene o debe tener. En la sección de comentarios profesionales se pueden encontrar diversos puntos de vista de destacados arqueólogos.
La arqueología bíblica es una materia de estudio polémica, con varios puntos de vista sobre cuál es el propósito y las metas que esta tiene o debe tener. En la sección de comentarios profesionales se pueden encontrar diversos puntos de vista de destacados arqueólogos.
Arqueología Babilonica
El conocimiento histórico de la topografía de Babilonia ha derivado de los escritores clásicos, las inscripciones de Nabucodonosor II y las excavaciones del Deutsche Orientgesellschaft (Sociedad Oriental Alemana), comenzadas en 1899. La topografía se corresponde prácticamente con la Babilonia del citado monarca, ya que la ciudad más antigua fue destruida por Senaquerib sin dejar apenas rastro. Las citadas excavaciones alemanas fueron las que verdaderamente comenzaron a descubrir la ciudad, si bien la británica Indian Company había dado pie a las excavaciones de Layard en 1850, Rawlinson en 1854 y Rassam en 1880; sin embargo, estas incursiones sirvieron más para expoliar objetos hoy expuestos en el Museo Británico que para descubrir y comprender verdaderamente la ciudad. Los alemanes encontraron en Kasar, nombre de uno de los montículos que crecieron sobre las ruinas, los restos de los palacios y fortalezas y reales, y en Amram, otro de los montículos, los cimientos del zigurat. Los equipos de las excavaciones de la Sociedad Oriental Alemana estaban formados íntegramente por arquitectos desde la expedición de Robert Koldewey, cuyo interés primordial era localizar edificios y levantar planos precisos, para lo cual habían desarrollado un método que permitía encontrar con mayor facilidad muros de barro. A pesar de que les debemos el conocimiento de la Babilonia de Nabucodonosor II, su interés por la arquitectura de la ciudad les hizo prestar poca atención a inscripciones, cerámicas, huesos y otro tipo de restos.
Para 1900 Robert Koldewey ya había encontrado la Puerta de Ishtar y despejado parte de la Avenida de las Procesiones e inspeccionado someramente toda el área, que incluía, además de los montículos de Amram y Kasar (o Kasr), los de Babil, Merkez y Homera, en total unos 18 km2. Los tres últimos se corresponden con las zonas del palacio de Verano, el área residencial de grandes casas en torno al templo de Ishtar de Agadé, y la zona del anfiteatro griego. Centrado en los dos primeros y con visos a trasladar tablillas y otros restos a Alemania, Koldewey solicitó la construcción de una vía férrea y contrató entre 200 y 250 hombres. Ayudado por otros arquitectos, comenzó un estudio sistemático del yacimiento que le llevó a diseccionar las distintas capas históricas hasta la del segundo milenio antes de Cristo; aunque su intención era continuar, no fue posible debido al nivel freático del lugar. En 1924 Koldewey revisó los informes de las excavaciones, recientemente publicados. Murió en 1925.
Otras excavaciones importantes, aunque no tan reveladoras, fueron las también alemanas de 1970 y las iraquíes de 1978-1989, realizadas por la Organización Estatal de Antigüedades y Patrimonio de Irak, cuyo mayor interés era la reconstrucción de diversos monumentos arquitectónicos.
Para 1900 Robert Koldewey ya había encontrado la Puerta de Ishtar y despejado parte de la Avenida de las Procesiones e inspeccionado someramente toda el área, que incluía, además de los montículos de Amram y Kasar (o Kasr), los de Babil, Merkez y Homera, en total unos 18 km2. Los tres últimos se corresponden con las zonas del palacio de Verano, el área residencial de grandes casas en torno al templo de Ishtar de Agadé, y la zona del anfiteatro griego. Centrado en los dos primeros y con visos a trasladar tablillas y otros restos a Alemania, Koldewey solicitó la construcción de una vía férrea y contrató entre 200 y 250 hombres. Ayudado por otros arquitectos, comenzó un estudio sistemático del yacimiento que le llevó a diseccionar las distintas capas históricas hasta la del segundo milenio antes de Cristo; aunque su intención era continuar, no fue posible debido al nivel freático del lugar. En 1924 Koldewey revisó los informes de las excavaciones, recientemente publicados. Murió en 1925.
Otras excavaciones importantes, aunque no tan reveladoras, fueron las también alemanas de 1970 y las iraquíes de 1978-1989, realizadas por la Organización Estatal de Antigüedades y Patrimonio de Irak, cuyo mayor interés era la reconstrucción de diversos monumentos arquitectónicos.
Restos arqueológicos
Además de las propias ruinas y de las reconstrucciones efectuadas en el siglo XX, hay una serie de restos arqueológicos que fueron trasladados de su lugar de origen y se encuentran actualmente expuestos en diferentes lugares del mundo.
Restos arquitectónicos
- Berlín: Museo de Pérgamo. Restos numerados y reconstruidos de la Puerta de Ishtar y de la fachada de la sala del trono del palacio real de la ciudad interior
Otros restos artísticos
- Estambul: İstanbul Arkeoloji Müzesi. Paneles de ladrillos vidriados con figuras en relieve y pintados.
Tablillas cuneiformes
Berlín: Staadliche Museum y Vorderasiatisches Museum. Tablillas recogidas en las excavaciones alemanas de 1899-1917.53
Londres: Museo Británico. Tablillas recogidas principalmente entre 1879 y 1882.
Asiriologia
Asiriología (del griego Ἀσσυρίᾱ, Asiria y -λογία, estudio) es uno de los llamados estudios clásicos: el estudio arqueológico, histórico y filológico de las culturas del Antiguo Próximo Oriente que usaban la escritura cuneiforme y la lengua acadia y sus dialectos. Otras lenguas como el sumerio, el elamita, el hitita, el hebreo y el arameo también son estudiadas por los asiriólogos, especialmente con fines comparativos.
Los estudios asiriológicos se centran especialmente en Mesopotamia: no sólo en Asiria (su zona septentrional), sino también en Babilonia (su zona central) y en Sumeria (su zona meridional, donde apareció inicialmente la civilización); de forma que también se usa muy habitualmente el término sumeriología.
Además de los testimonios indirectos, procedentes de la literatura bíblica y grecorromana, la principal fuente documental para la asiriología o sumeriología es el gran número de tablillas cuneiformes halladas en los yacimientos arqueológicos de la región.
El estudio de las primeras ciudades de la región (y del mundo), como Ur, es de un valor incalculable para entender el nacimiento y desarrollo de fenómenos centrales para la historia humana, como el proceso de urbanización, la escritura, la ciencia y la técnica, la religión, el poder político y la guerra.
Los estudios asiriológicos se centran especialmente en Mesopotamia: no sólo en Asiria (su zona septentrional), sino también en Babilonia (su zona central) y en Sumeria (su zona meridional, donde apareció inicialmente la civilización); de forma que también se usa muy habitualmente el término sumeriología.
Además de los testimonios indirectos, procedentes de la literatura bíblica y grecorromana, la principal fuente documental para la asiriología o sumeriología es el gran número de tablillas cuneiformes halladas en los yacimientos arqueológicos de la región.
El estudio de las primeras ciudades de la región (y del mundo), como Ur, es de un valor incalculable para entender el nacimiento y desarrollo de fenómenos centrales para la historia humana, como el proceso de urbanización, la escritura, la ciencia y la técnica, la religión, el poder político y la guerra.
Arqueologia Andina
La civilización Caral o cultura Caral se desarrolló entre 3000 y 1800 a. C., siendo la expresión más nítida del surgimiento de las primeras sociedades complejas en el área norcentral peruana o Norte Chico. En toda esta área destaca claramente el valle de Supe, ubicado en Barranca, al norte de Lima, donde en apenas 40 kilómetros desde el mar, se han identificado 20 asentamientos de esa civilización, siendo la de mayor dimensión y complejidad la ciudad de Caral o Caral-Supe, de la que deriva el nombre de la cultura.
La existencia de esta civilización fue desvelada a partir de 1996, gracias a los trabajos de un equipo de arqueólogos encabezados por Ruth Shady, a través del Proyecto Especial Arqueológico Caral-Supe. Los estudios rigurosos han demostrado que esta civilización es contemporánea con otras civilizaciones primigenias del mundo, como la de Egipto, India, Sumeria, China, pero a diferencia de ellas (que intercambiaron sus logros), se desarrolló en completo aislamiento. En América, es la más antigua de las civilizaciones prehispánicas, superando en 1500 años a la civilización Olmeca, otro importante foco civilizatorio situado en Mesoamérica. En el Perú supera en antigüedad a la cultura Chavín (1200 a. C.), que durante mucho tiempo había sido considerado como la cultura madre del Perú. Actualmente, según todos los indicios, se puede afirmar que a partir de la civilización caral se origina la civilización andina.
Ubicación Geográfica
El área de desarrollo e influencia de la civilización caral, llamada área norcentral peruana, es de 400 por 300 km, y comprende los valles de la costa (Santa, Nepeña, Sechín, Culebras, Huarmey, Fortaleza, Pativilca, Supe, Huaura, Chancay y Chillón), los callejones serranos de Huaylas y Conchucos junto con el altiplano de Junín, y las cuencas de los ríos Marañón, Huallaga y las cabeceras del Ucayali en la selva.
En toda esta área destaca claramente el valle de Supe, ubicado en la provincia de Barranca, departamento de Lima, donde en apenas 40 kilómetros desde el mar, se han identificado 20 asentamientos de esta civilización, cuyas extensiones van de 0,16 hectáreas hasta casi 80 hectáreas. Ocho de ellos son los de mayor tamaño, entre los que destaca nítidamente por su complejidad la ciudad sagrada de Caral, de la que deriva el nombre de la cultura. Fue, sin duda, la capital de la región. Los otros asentamientos con construcciones monumentales son Pueblo Nuevo, Cerro Colorado, Allpacoto y Llapta (en la margen derecha del Supe); y Lurihuasi, Miraya y Chupacigarro (en la margen izquierda). En el litoral cercano a la desembocadura del Supe destaca Áspero, que fue según todos los indicios la ciudad pesquera de Caral.
Hasta antes del descubrimiento de esta cultura, ya se conocía la existencia de diversos asentamientos precerámicos a lo largo de esa área norcentral peruana, a partir de los cuales se había planteado la existencia de organizaciones sociales de nivel jefatural. Destacan los de La Galgada, en el callejón de los Conchucos, Piruro en el Marañón, Huaricoto en el callejón de Huaylas, Kotosh en el Huallaga, Las Haldas en Casma, Los Gavilanes en Huarmey, Áspero en Supe, Bandurria y Río Seco en Huaura y El Paraíso en el Chillón.
Características Generales
Aunque en lugares como Valdivia, en Ecuador, se producía cerámica desde 4000 a. C., en Caral no se utilizó; de allí viene la denominación de precerámica, aunque la doctora Ruth Shady, su descubridora, prefiere hablar de acerámica (sin cerámica), pues al disponer los antiguos pobladores de Caral de una gran cantidad de mates (cucurbitáceas) que usaban como recipientes, no necesitaban de la alfarería.
El logro más impactante de esta primera civilización fue la construcción de extensas ciudades, con edificios monumentales, construidos de una manera muy ingeniosa con piedra, barro y materiales vegetales, en cestos tejidos y cerrados con dimensiones y pesos muy variados (shicras) pero bastante homogéneos para facilitar las labores de acuerdo a la fortaleza física de sus albañiles y constructores. Las formas predominantes son las pirámides escalonadas, las plazas circulares o semicirculares hundidas en los frentes, con escaleras que daban acceso a la cima, donde se observan habitaciones y espacios para rituales y ceremoniales.
La evidencia arqueológica muestra también una significativa producción agrícola de algodón para redes de pesca y prendas tejidas en técnica torzal, así como muy sofisticadas expresiones de arte musical en la confección de flautas con figuras incisas de animales míticos que sugieren un carácter religioso.
Las diferencias de tamaño entre los asentamientos y sus edificios evidencian jerarquía entre las poblaciones que los ocuparon, e incluso la existencia de una organización política que hizo posible su construcción.
Categorías crono-arqueológicas
Asimismo existen delimitaciones crono-espaciales a nivel mundial, que delimitan una serie de grandes áreas culturales, cuyos estudios se configuran usualmente como subdisciplinas con cierta autonomía dentro de la ciencia arqueológica. Las más destacables serían:
Arqueología americana
Arqueología andina (véase también Arqueología del Perú)
Arqueología comparativa = Área Intermedia; Norte, Centro y Sur América
Arqueología de sociedades complejas = Área Intermedia; Norte, Centro y Sur América
Arqueología mesoamericana
Arqueología de Egipto y de Próximo Oriente
Arqueología Acadia
Arqueología Babilónica
Arqueología bíblica
Arqueología de Israel
Arqueología egipcia (división que conforma junto a otros campos de estudio la Egiptología)
Arqueología fenicio-púnica
Arqueología Hitita
Asiriología
Sumeriología
Arqueología europea
Arqueología clásica
Arqueología europea
Arqueología medieval
Arqueología postmedieval
Arqueología prehistórica
Arqueología protohistórica
Arqueología mundial
Arqueología del conflicto
Arqueología del pasado contemporáneo
Arqueología industrial
Arqueología americana
Arqueología andina (véase también Arqueología del Perú)
Arqueología comparativa = Área Intermedia; Norte, Centro y Sur América
Arqueología de sociedades complejas = Área Intermedia; Norte, Centro y Sur América
Arqueología mesoamericana
Arqueología de Egipto y de Próximo Oriente
Arqueología Acadia
Arqueología Babilónica
Arqueología bíblica
Arqueología de Israel
Arqueología egipcia (división que conforma junto a otros campos de estudio la Egiptología)
Arqueología fenicio-púnica
Arqueología Hitita
Asiriología
Sumeriología
Arqueología europea
Arqueología clásica
Arqueología europea
Arqueología medieval
Arqueología postmedieval
Arqueología prehistórica
Arqueología protohistórica
Arqueología mundial
Arqueología del conflicto
Arqueología del pasado contemporáneo
Arqueología industrial
Yacimientos arqueológicos en Venezuela
Parque Arqueológico Piedra Pintada
El Parque Arqueológico Piedra Pintada forma parte del parque nacional San Esteban, está situado en el Sector Tronconero de Vigirima, en el municipio de Guacara, Estado Carabobo (Venezuela), y es un importante conjunto de petroglifos, menhires y restos arqueológicos pertenecientes a una de las tribus arahuacas.
Desde 1996, se realizó un estudio donde se contempló la realización de un inventario y estudio exhaustivo de los petroglifos; excavaciones arqueológicas; un guion museológico; capacitación de guías; módulos expositivos y un anteproyecto de senderos de interpretación, este último está aún en proceso de realización. Esta actividad y proyecto ha sido avalada y supervisada por el Instituto del Patrimonio Cultural. El complejo arqueológico megalítico de Piedras Pintadas, Vigirima está protegido por la Ley de Salvaguarda del Patrimonio Cultural.
Taima Taima
Taima Taima es un sitio arqueológico ubicado unos 20 kilómetros al este de Coro, en el estado de Falcón(Venezuela).
Fue investigado desde 1964 por Josep María Cruxent (1911-2005), Alan Bryan, Rodolfo Casamiquela, Ruth Gruhn y Claudio Ochsenius.
Tiene una antigüedad humana detectada de 14 200 a 12 980 años. Señala un antiguo poblamiento preclovis en América del Sur, que se utiliza como evidencia de la teoría del poblamiento temprano.
Entre los hallazgos de Cruxent se encuentra una pelvis de mastodonte atravesada por la punta de piedra de una lanza. Su fechamiento geológico y de carbono-14 coinciden en el 13 000 a. P. (11 000 a. C.).
Subdisciplinas arqueológicas
La arqueología en el gran desarrollo teórico y metodológico de las últimas décadas, ha dado lugar a numerosas subdisciplinas de marcado carácter temático-conceptual:
Arqueología de campos de batallas
Recibe diversas denominaciones, tales como arqueología del conflicto, arqueología de los campos de batalla o arqueología de la guerra. Su objetivo es el estudio de los procesos bélicos a partir de los restos recuperados en los escenarios donde éstos se desarrollaron; siendo la prospección arqueológica con detectores de metales determinante.
Arqueología Histórica
La arqueología histórica es la arqueología que estudia culturas con algunas formas de escrituras. En Inglaterra los arqueólogos descubrieron planos de pueblos medievales del siglo XIV, abandonados después de que se produjeran crisis, como es el caso de la peste negra.
La arqueología, de la misma manera que se dedicar al estudio de la antropología (arqueología antropológica), también se dedica al estudio de la historia (arqueología histórica). La arqueología histórica es la crónica de la humanidad desde los comienzos hasta hace unos tres millones de años, aunque las fuentes históricas comienzan más temprano, con el nacimiento del documento escrito en Asia Occidental en el 3000 a. C., aunque en otros lugares, Australia por ejemplo, existió en 1788 d. C. d. C.. En ese sentido, la arqueología comprende los periodos y lugares donde existen dichos documentos e inscripciones.
Etnoarqueología
La etnoarqueología se trata del estudio de una comunidad humana viva a partir de la cultura material (aproximación arqueológica). En sus inicios se postuló como un modo de entender el registro arqueológico con analogías de referentes culturales actuales. En las corrientes posmodernas se concibe como una buena forma de obtener referentes inspiradores para elaborar las interpretaciones arqueológicas y construir narrativas enriquecedoras.
La arqueología cognitiva
Es la rama de origen reciente que responde a la necesidad de estudiar las formas de pensamiento y las estructuras simbólicas del pasado a partir de los restos materiales hallados. Se formó principalmente para conocer las sociedades prehistóricas debido a la falta de fuentes escritas que aportaran información de estas; este nuevo enfoque "imaginativo" mezclado con métodos científicos de vanguardia fue uno de los instigadores de la Nueva Arqueología.
Arqueología contextual
Se preocupa por el contexto de un artefacto y de las asociaciones que hay entre varios objetos. También tienen en cuenta la cantidad de objetos idénticos que hay en un yacimiento y el lugar donde se encuentra. Por lo tanto, permite averiguar la función de un artefacto y la información sobre cómo influía en la sociedad.
Arqueología darwinista
Afirma que los procesos que llevan a la estabilidad y al cambio cultural son similares a los de la evolución biológica. La evolución cultural es el conjunto de modificaciones en la distribución de los atributos de las sociedades. También defiende que la cultura humana es consecuencia de un aprendizaje social a través del contacto con otros seres humanos.
Arqueología de género
Es el estudio del rol, acciones e ideologías que hay entre hombres y mujeres. Busca las diferencias entre el papel social de cada uno de ellos en distintas culturas. Se fija en las desigualdades biológicas y en las construcciones sociales que se transmiten a los humanos desde la infancia.
Arqueología experimental
La arqueología experimental representa la aplicación del método experimental para desarrollar procesos que han sido creados por la arqueología.
Arqueología holística
La arqueología holística engloba todos los aspectos de las sociedades humanas (ecología, economía, política, arte, ideología...) y los relaciona entre ellos. Sus principales fuentes provienen de otros tipos distintos de la misma disciplina: etnografía, etnohistoria y arqueología contextual.
Arqueología del paisaje
La arqueología del paisaje es un método por el cual se intenta conocer como era el medio en la antigüedad. Se hacen pequeños sondeos aleatorios de 2 x 2 en el ámbito circundante que se quiere estudiar y gracias a ello se saca información de la diversidad del medio y de las diferentes actividades que se practicaron en cada parte del medio.
Arqueología de la arquitectura:
Arqueometría
La arqueometría es la incorporación de técnicas físico-químicas aplicadas al estudio arqueológico. Esta permite nuevas perspectivas a la investigación arqueológica. Dentro de estos estudios, resalta la caracterización de materiales, el estudio sobre composición y manipulación de elementos metalúrgicos, el análisis de contenido de recipientes arqueológicos, etc.
Paleoetnobotánica es una subdisciplina de frontera ubicada entre la arqueología y la botánica. Su objetivo principal es estudiar las interacciones antiguas entre los seres humanos y el mundo vegetal.
La paleoetnobotánica
es el estudio de restos botánicos encontrados como evidencia arqueológica en un yacimiento.
Tafonomía arqueológica
La tafonomía es el estudio de la formación de yacimientos.
Estudios osteológicos
Zooarqueología
La zooarqueología es el estudio de los restos antiguos de animales. Con esta disciplina científica se pueden identificar las especies existentes en un yacimiento arqueológico, pudiendo dar un patrón alimenticio de la ocupación.
La tafonomía es el estudio de la formación de yacimientos.
Estudios osteológicos
Zooarqueología
La zooarqueología es el estudio de los restos antiguos de animales. Con esta disciplina científica se pueden identificar las especies existentes en un yacimiento arqueológico, pudiendo dar un patrón alimenticio de la ocupación.
Antropología física
La antropología física en su aplicación a la arqueología es un análisis de los restos óseos humanos, en aspectos biológicos del ser humano y de su relación con los aspectos históricos y culturales.
Arqueología pública
Si la arqueología intenta crear un nuevo conocimiento desde el estudio de la cultura material de sociedades pasadas, la arqueología pública trata de estudiar todas las relaciones entre esa Arqueología y la sociedad actual para así mejorar su entendimiento general y la coexistencia entre ambas.
Arqueología genética y molecular
La arqueogenetica es un término acuñado por el arqueólogo británico Colin Renfrew, que se refiere a la aplicación de las técnicas de la genética de poblaciones para el estudio del pasado humano.
Métodos de datación absoluta
Dendrocronología
La dendrocronología (dendro: árbol; cronos: tiempo) es fundamental actualmente y necesaria para correlacionar los resultados del C-14. Se basa en los anillos de crecimiento de los árboles. Su conocimiento se remonta al Renacimiento ya que Leonardo da Vinci hizo un estudio sobre ellos. Sin embargo, fue en el siglo XVIII cuando naturalistas como Duhamel y Buffon empezaron a realizar estudios sobre ello con árboles que habían sido cortados simultáneamente. Así, reconocieron que anualmente el árbol generaba un anillo más. Cuando llegaron al anillo 28 (contando desde fuera) observaron que en todas las especies éste tenía un grosor más pequeño que denotaba un escaso crecimiento del árbol. Cada anillo tiene una parte más clara y otra más oscura debido a las diferencias en el ritmo de crecimiento según las estaciones. El anillo 28 corresponde al año 1709 en el que hubo unas heladas históricas. Fueron los primeros que relacionaron las características climáticas con la forma de los anillos. A principios del siglo XX, el astrónomo norteamericano Douglass estudió si la radiación procedente de las manchas solares quedaban reflejadas en el crecimiento de los árboles. Para ello observó la evolución de los anillos intentando llegar lo más lejos posible. Así, utilizó especies de larga duración como las secuoyas o los pinos amarillos. Tras esto, se consiguió realizar secuencias de la morfología de los anillos de zonas geográficas concretas. Hoy en día en la mayor parte de Europa se tiene una secuencia maestra que se remonta a 3000 años e incluso en ciertos lugares hasta los 5000. Para la arqueología europea el material básico de construcción es la madera debido a su riqueza forestal por lo que se posee gran cantidad de material para estos estudios. Es el método más seguro que existe.
Hay que tener cuidado con el factor "madera antigua" en donde se datan objetos hechos con partes interiores de un árbol (podría decirse que el corazón del árbol) pudiendo dar fechas alteradas de varios cientos de años.
Carbono 14
El profesor Libby, que trabajaba en el Instituto de Estudios Nucleares de Chicago, desarrolló el método adecuadamente entre 1946-1949. El método alcanzó una popularidad inmediata y Libby obtuvo el premio Nobel en 1960. Este rápido reconocimiento se debe a dos grandes ventajas: el uso de muestras provenientes de cualquier lugar del mundo sin necesidad de un estudio previo, y que alcanza una cronología bastante amplia que llega hasta el 50.000 BP. Actúa sobre la materia orgánica. Los átomos de C14 están presentes en la atmósfera y se forman en la estratosfera a partir de la interacción de la radiación solar y el N. El C14 es absorbido por los seres vivos mediante la fotosíntesis de las plantas a través de la cadena alimenticia. No todos los seres vivos poseen la misma proporción de C14.
Mientras un organismo está vivo conserva la misma proporción de C14 en el organismo; cuando muere disminuye de forma constante. El ritmo de pérdida se conoce como la vida media del C14 y es conocido. Libby calculó una vida media de 5568 años, pero actualmente se ha corregido en 5730. Esta cifra se refiere al tiempo que tarda un organismo en disminuir la proporción de C14 a la mitad. Así, al cabo de otros 5730 años se habrá reducido a la mitad del 50 % que quedaba. Los laboratorios miden la cantidad de C14 que tiene la muestra. La diferencia entre esta cifra y la que debería tener se traduce en años. El trabajo de laboratorio es muy complejo ya que hay que limpiar el elemento con gran cuidado para no contaminar el exterior. Son necesarios unos gramos de materia prima para obtener la datación. Hoy día existe una opción, el C14AMS, que trabaja con cantidades muy pequeñas pero es más caro y laborioso. No todos los materiales suponen la misma facilidad de datación ya que las conchas son muy complicadas por su alto porcentaje de minerales. Por el contrario, los huesos se fechan muy bien aunque lo más fácil es la madera. Gracias a este método se puede datar el polen.
Potasio-argón
El método del potasio-argón es otro método de datación radiométrica, que permite datar rocas de origen volcánico asociadas a algunos de los restos fósiles y arqueológicos más antiguos del origen de la humanidad. En el momento de solidificación de una roca ígnea, el 40K que contiene comienza a desintegrarse, a un ritmo conocido, en 40Ar. La vida media del 40K es de 1,25 Ma y la edad de la roca viene dada por la proporción 40K/40Ar que presenta actualmente. Este método, junto al similar del argón-argón (basado la proporción 40Ar/39Ar) ha dado muy buenos resultados en los yacimientos de origen sedimentario africanos, donde es frecuente la intercalación de rocas procedentes de episodios volcánicos, como por ejemplo en la secuencia estratigráfica de la Garganta de Olduvai. Otro ejemplo es el del yacimiento de Laetoli, donde una erupción volcánica dejó una capa de cenizas, fechada por K/Ar en 3,7 Ma, sobre la que imprimieron sus huellas algunos animales y varios ejemplares de Australopithecus afarensis.
Termoluminiscencia
La termoluminiscencia se usa para cerámicas, pero en ocasiones se ha usado para elementos de sílex. El sistema consiste en que las partículas de arcilla van absorbiendo materiales radiactivos del suelo (uranio, potasio). Cuando esa arcilla es sometida a altas temperaturas la carga radioactiva queda a 0. A partir de ese momento vuelve a empezar a cargarse. Se traslada al laboratorio el resto y en condiciones controladas se vuelve a someter al calor y unas máquinas miden la cantidad de carga que se desprende y que había acumulado la arcilla. Cuanto mayor sea la carga radioactiva, mayor será su antigüedad. El sistema se completa analizado la carga de ese estrato para ver si el estrato ha fomentado la carga, ya que el ritmo de carga puede depender del estrato. Tras el proceso, el material queda completamente destruido.
Paleomagnetismo
Se basa en el hecho de que la polaridad magnética de la Tierra no es estática: los polos Norte y Sur magnéticos se invierten cada cierto tiempo por causas aún poco conocidas. No se presentan pautas o ciclos periódicos. Estos cambios de polaridad quedan reflejados en las rocas de origen ígneo y en algunos estratos sedimentarios, en los que las partículas minerales magnéticas quedan orientadas según la posición de los polos magnéticos en el momento de su formación, a modo de "brújulas fosilizadas". El último gran cambio de polaridad (de sur a norte) se dio hace 780 milenios (Inversión magnética de Brunhes-Matuyama). El paleomagnetismo fue muy importante en la excavación de Atapuerca: en el sector de Gran Dolina, los estratos en los que se estaban sacando restos humanos de Homo antecessor (TD 6), se formaron en una época de polaridad inversa, por lo que son más antiguos de 780.000 años.
Racemización de aminoácidos
La racemización de aminoácidos es un método de datación química que consiste en la conversión de un compuesto L-aminoácido a un D-aminoácido o viceversa y permite datar muestras orgánicas hasta el Paleolítico Medio.
Estudio arqueologico
Prospección
La prospección es la exploración de un territorio en busca de indicios materiales que muestren la existencia de un yacimiento arqueológico.
Lo primero que se ha de hacer es delimitar el terreno que vamos a estudiar. Los límites pueden ser arbitrarios (administrativos) o geográficos (búsqueda de regiones con ciertas similitudes). Podemos optar por dos sistemas: la cobertura total (recorrer todo el territorio a estudiar observando todo con la misma intensidad, mayor frecuencia a menor territorio) o el muestreo (selección de áreas significativas). Un elemento fundamental es la intensidad de la prospección que responde al detalle con el que se va a observar el terreno a prospectar. Los prospectores realizan, colocados en línea, un barrido en diferentes direcciones para observar lo que hay en el suelo. Cuanto más juntos vayan, mayor será la intensidad. La prospección se basa en la visibilidad de los yacimientos y habrá que distinguir si no vemos los restos porque no los haya o porque no lo vemos.
La prospección se ha considerado el paso previo para la excavación, pero es una actividad arqueológica por sí misma.
Excavación
Dentro de las excavaciones arqueológicas podemos observar diversos tipos: las de urgencia, las de investigación y las de patrimonio. Las excavaciones de urgencia están condicionadas por la transformación del espacio. Esta transformación va ligada a la construcción de infraestructuras o edificios. Esto exige documentar los restos ya que el sitio va a ser destruido por la construcción. Este tipo las pagan las constructoras públicas o privadas que van a modificar el espacio y se realiza un Estudio de Impacto Arqueológico. Las excavaciones de investigación se realizan para descubrir nuevos datos que nos ayudan a cubrir lagunas de información concretas que hay en la Historia. Las de patrimonio cultural se centran en el desarrollo estratégico de actividades culturales (turismo) y el aporte de interés a ciertos puntos de atracción del territorio.
La arqueología es una ciencia que permite registrar a partir de sus evidencias materiales la evolución de la actividad humana, es decir, en creación, en tecnología y ciencia. Para poder excavar hay que tener el permiso de la autoridad correspondiente. Existe un registro arqueológico de las excavaciones y las autoridades son las que exigen una serie de condiciones para la excavación de los yacimientos: el lugar donde se han de guardar los restos, el director de la excavación, las fechas, el derecho a inspecciones, la elaboración de un libro diario donde se recoja todo lo relacionado con la excavación. Una vez finalizada la excavación se ha de elaborar un inventario de materiales para el ingreso en el museo y una memoria preliminar para la autoridad correspondiente analizando los resultados de la excavación.
Trabajo de Laboratorio
Con los datos obtenidos en la excavación, se deben analizar los restos obtenidos exhaustivamente. Para ello se realizan las tareas de procesado en el laboratorio.
En primer lugar, los restos se lavan y consolidan (en caso de ser necesario) evitando deteriorar los materiales. Hay que tener cuidado al lavar la cerámica pintada, para no deteriorar su pigmentación. Los huesos son higroscópicos, por lo que no es bueno lavarlos con agua, sino con un pincel o una esponja en seco. Es conveniente lavar en seco y cuidadosamente los estucos, yesos y otros materiales frágiles.
Después se llevan a cabo las labores de siglado y registro, en donde cada pieza se sigla para poder identificarla en caso de confusión. Se sigla identificando el yacimiento y un número con la pieza exacta que se indica en el registro. Hecho esto, se ha de identificar la cerámica mediante tablas tipológicas.
Cuando está hecho todo lo anterior, se ha de dibujar el material representativo para la publicación. Además, hay que analizar mediante otras técnicas (métodos de datación, medios químicos...).
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